34
No busques la felicidad: la vida es breve como un suspiro.
Convertidos en polvo, flotan, en el molino que contemplas, Jamshyd
y Kaikobad. El universo es un espejismo; la vida, un sueño.
35
Pasa la vida cual rápida caravana. Detén tu marcha y trata de ser
feliz. ¿Por qué te afliges, pequeña mía? Dame vino; la noche se
acerca.
36
Deléitate con todos los perfumes, colores y melodías; acaricia a
todas las mujeres. Repítete que la vida es corta, y que bien pronto
volverás al polvo, así seas el agua de Zemzem o de Selsebil.
37
Aspirar a la paz aquí abajo: locura; creer en el eterno reposo: locura.
Después de la muerte, tu sueño será breve, y habrás de renacer en
un puñado de hierba pisoteada por el viandante o en una flor que el
sol marchitará.
38
Me pregunto qué es, en verdad, lo que poseo, qué subsistirá de mí
cuando haya muerto. La vida es breve como un suspiro. Llamas que
el viajero olvida, cenizas que dispersa el viento: he ahí la vida del
hombre.
39
¡Bebedor, urna inmensa! Ignoro quién te modeló; sólo sé que puedes
contener tres medidas de vino y que mañana te romperá la muerte.
Entonces me preguntaré, con mayor afán, para qué fuiste creado,
por qué fuiste dichoso y hoy no eres ya sino un puñado de polvo.
40
No trates de encontrar amigos en la mundana feria que atraviesas;
no busques más un asilo seguro. Soporta con entereza el dolor y no
suspires por un remedio que no has de hallar. Sonríe en el
infortunio y no esperes de nadie una sonrisa: perderías el tiempo.
41
Hace ya mucho tiempo que mi juventud fue a reunirse con todas las
cosas muertas. Yaces hoy, primavera de mi vida, junto con las
primaveras de antaño. ¡Oh, juventud mía; pasaste sin darme
cuenta! Te fuiste desvaneciendo insensiblemente, como la dulzura
de la florida estación.
42
En Primavera, suelo irme a sentar en el lindero de algún campo
florido. Si alguna hermosa doncella me ofrece entonces un ánfora de
vino, no pienso en mi salvación: si tal cosa me preocupara, sería
más indigno que un perro.
43
¿Para qué encender las lámparas, si los huéspedes se han quedado
dormidos? Veo lo suficiente para notar su palidez. Así estarán, 13
extendidos y yertos, en la noche del sepulcro. ¿Para qué encender
las lámparas, si no hay aurora entre los muertos?
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